Un maestro de la animación, un genio de las ambientaciones, un gran monitor que hace grupo, una pieza fundamental de nuestro puzle, la risa y el buen royo hecho persona, muy currante y con mucho gusto. En definitiva y como todos ya sabemos; ¡UN TÍO COJONUDO!
En estos dos añitos que nos conocemos has provocado cientos de risas, has contagiado tu alegría y has contribuido de la mejor forma posible a que esto sea un sueño hecho realidad para muchos niños y niñas.
Con esa risa tan contagiosa y el buen rollo que predicas te has convertido en alguien del que sería muy difícil prescindir. Espero que sigamos compartiendo muchos más momentos como estos y que pueda seguir viendo esos disfraces cósmicos y escuchando tus teorías científicas sobre los desechos humanos. Un abrazo,
Ricardo.
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